Noah Edric Redwyne.

DATOS GENERALES DEL PERSONAJE

● Ocupación: Sanador.
● Nacionalidad: Londinense.
● Lugar de residencia actual: Londres.
● Clase social: Clase media, sí. Más o menos.
● Familiares directos:

• Teresa M. Redwyne. Madre. Muggle. 67 años.
  
• Teodore P. Redwyne. Padre. Muggle. 65 años.

INFORMACIÓN MÁGICA

● Linaje: Sangre Muggle.
● Escuela: Hogwarts.
● Curso: Graduado.
● Casa: Asistió a Hufflepuf.
● Bando: Neutral, inclinado a defender su sangre

DATOS GENERALES DE PERSONALIDAD

● Virtudes:
● Es leal.
● Trabajador.
● Optimista.
● Vivaracho.
● Inteligente.
● Defectos:
● Patoso.
● Algo torpe.
● Demasiado altruista.
● Cuando se enoja, es tremendamente obstinado.
● Un gran ego.
● Gustos:
● El baile. La música. Y todo lo relacionado.
● Un buen café. Sin azúcar ni nada. Solo. Y bien cargado.
● Dormir. Va, ¿A quién no le gusta dormir?
● El fútbol. Es fiel fan de Liverpool. El Quiddith también le gusta, pero el fútbol es su pasión.
● El caminar de una mujer. Va, es algo de admirar, ¿a qué no?
● Los cigarrillos, viejo vicio.
● Disgustos:
● Qué le dejen con la palabra en la boca. Cómo le enoja.
● Qué le lleven la contraria.
● No tener la razón.
● La obsesión con la sangre.
● La matemática.
● Qué no hagan caso a sus indicaciones cómo doctor.
● Debilidades:
● Sus padres. Se preocupa por ellos.
● Grace. ¿Para qué más?
● Otros:
● Tiene un perro. Sí, un perro. No un gato ni una rana, cómo el resto de la gente mágica. Él tiene un perro. Un pastor alemán que ha llamado Dober. Fue lo primero que se le vino a la cabeza cuando su madre se lo regaló, para que fuera más responsable. Dober tiene siete años y es uno de sus mejores amigos, pues dicen que el perro es el mejor amigo del hombre. ç

● Lee mucho. Sobretodo literatura muggle. Le gusta no solo conocer del mundo mágico, si no también del mundo donde nació. Es un hombre culto en muchas cosas. Puede hablar casi de cualquier cosa, si le preguntas.

● Está enamorado. Como un adolescente, está enamorado de Grace, su mejor amiga. Ha intentado contárselo, declararse, hacer que le escuche, pero ella siempre le rehuye sus intentos, lo que le hace pensar que no es correspondido. Le duele, claro que sí, pero sigue intentando, pues no dejará de hacerlo hasta que ella le ordene lo contrario.
● Descripción Psicológica:

Él no es Don Quijote. Y tampoco es el príncipe que rescata de su profundo sueño a Aurora. No es siquiera el héroe que salvaría a todos en caso de que un mago se vuelva loco y amenace con matar a todos aquellos que le de la gana. No, él no es el caballero del corcel que toda mujer espera, ni el chulo que se las gana a todas con una sonrisa de Don Juan que nadie le gana. Él es más bien como Sancho Panza, sin la pansa. Simpático, vivaracho, siempre dispuesto a ayudar al héroe así sea en la sombras, pues no le importa ser reconocido, si no simplemente ayudar, como buen altruista. Él no es Batman, con sus millones y millones que, el tipo se muere, y aun es millonario. Él es más bien como Robin, siempre con una sonrisa, arreglando el desastre que el caballero oscuro ha dejado a su paso salvando a la gente. Él es algo así como el ayudante de Merlín, no Merlín mismo. Patoso, sí. En ocasiones un poco torpe, pues se dice que el Sancho Panza aquí presente tiene dos pies izquierdos, pero eso al final no importa, porque así ha aprendido a levantarse y no hay hombre más valiente que aquél que cae y se levanta. Fiel creyente de que la vida vale la pena y está dispuesto a descubrir el propósito que tiene para él. ¿Qué dices? ¿Qué no sabes quién es Don Quijote, o Batman? Venga, ya, deja tu orgullo y ve a buscar un libro muggle, para qué entiendas que los muggles no comen magos, eah.


Amante empedernido de una melodía. Que si no hubiese sido sanador, hubiese sido profesor de baile, pero muggle. Porque la verdadera sazón de la música la tiene el rock'n roll. Él mismo es como una canción del género. Quizás alguna canción de Little Richard, bailando con Sue en el oeste y en el este. O tal vez, alguna de Elvis. El caso es que éste hombre es tan alegre como la melodía que le guía los pasos. Siempre intentando sacar la sonrisa de aquél que llega a su consultorio, pidiendo ayuda. Ayudando a ver de una forma positiva las cosas. Sus pacientes le necesitan y necesitan entender que después de una herida, no todo está acabado. Por eso, es sanador y no profesor. Porque le apasiona salvar la vida de aquél que tiene en frente, así sea si al final no le agradece. Más vale la vida que la muerte, y él intenta enseñar eso a sus pacientes. Eso sí, obstinado como ninguno. Y también tiene su ego en muy alta estima. Sí, también tiene carácter, ¡Por supuesto! Venga, tampoco el tipo es perfecto. Qué cuando se enoja se enoja, como cualquier humano sobre la tierra. Pierde la paciencia, pues la suya no es infinita y sí, también grita, bajo un argumento que realmente le haga enojar. Sin embargo, al poco rato vuelve a ser el mismo Robin de siempre, salvando al mundo y llevándolo sobre sus hombros, cueste lo que cueste.


Independiente, fuerte y firme, y así le gusta ser. Lo que a él le toca hacer, lo hace sin problema alguno. No le gusta que los demás hagan las cosas por él, pues él tiene dos brazos y puede con lo que venga. Sancho Panza andaba por la vida siendo quién sacaba al Quijote del enredo, y así mismo es Noah. ¿Qué se la va hacer? Un tejón, así de llano y sencillo. Leal, fiel, siempre ahí, con el coraje suficiente para defender la causa, sea cuál sea. De aquellos hombre que parecen ya extintos, así es Noah. ¿Mujeres? No es un mujeriego, pues, no le ve sentido a la palabrita. Sin embargo, venga, es hombre y todo hombre tiene su necesidad. Es capaz de enamorarse, sí, pero también disfruta del sexo pues no duda que el Sancho lo hiciera también. Las mujeres son una maravilla, y le encanta el conquistar a una. Más, aun así, su vida no se le va en ello. Tiene clara sus prioridades, y la primera es su trabajo y así, sus pacientes. Qué lo he dicho, no es el príncipe que vendrá a salvarte de tu propia vida. Tampoco es el típico chulo que las enamora a todas con la típica imagen de malote. No. Él es más bien el segundón, el Sancho Panza de la historia. Y disfruta siéndolo.

HISTORIA PERSONAL

● Historia:

• Nacido en el seno de una familia muggle. Modesta, sencilla y trabajadora. Su padre un comerciante que trabajaba todo el día y llegaba por las noches a ser saludado por su único hijo, siempre tan feliz de recibir a su padre. Su madre era maestra de instituto, y era quién siempre corregía a Noah en vocabulario, una rutina que él veía como fastidiosa pero que le ayudó en un futuro. Noah tuvo una infancia tranquila, sin nada realmente relevante qué mencionar. Era de los típicos niños muggles que salían del colegio, jugaba un poco de fútbol y luego se iba a casa a pelear con su madre porque no quería hacer la tarea de matemática. El detalle de su infancia llegó cuando, en una de éstas peleas cotidianas con su madre, todos los libros de la casa volaron haciendo un desastre. Mágicamente, tal cual en la película Matilda. Va, qué llevaron al pobre niño a tantos psicólogos, que Noah hasta perdió la cuenta. Nadie encontraba explicación, hasta que llegó la carta de Hogwarts. Tan esperada por aquellos que eran iguales a él y que él ni siquiera sabía que existía.
  
  
• El verano antes de entrar a su cuarto año, conoció a su nueva vecina. Grace. Una niña tres años menor que él, terriblemente encantadora. Con sus mejillas sonrojadas y su sonrisa de muñeca. Ahora, cuando lo piensa, Noah considera que desde entonces está enamorado, solo que no lo sabía. Ella venía de una familia igual a él, pero ella era una squib. Una bruja sin magia, raras en su especie. A Noah poco le importó. Se hicieron rápidamente amigos, grandes amigos y Noah intentó por todos los medios enseñarle a defenderse de aquellos comentarios inhumanos por parte de la gente elitista. Aprendió a quererla, primero como la hermana que nunca tuvo. Luego, como la mujer que siempre deseó. Le contaba historias de Hogwarts y se la llevaba consigo al mundo mágico para enseñarle a desenvolverse en el mundo que les pertenecía a ambos. Grace se convirtió en parte importante de su vida, aun cuando tuvo a su primera novia, a los dieciséis. Marianne terminó con Noah porque alegaba que Grace era más importante para él que ella misma. Y no se equivocaba, Noah nunca se arrepintió de ello.
  
  
• Salió de Hogwarts hace nueve años. Y apenas salió, entró en la academia de sanadores, pues era esa su vocación. Desde entonces, ejerce en San Mungo, un lugar de trabajo ideal. A pesar de terminar con Marianne, ésta y Noah aun se reunen como buenos amigos, junto a David, otro buen amigo. Incluso, es Marianne quién le alienta a qué termine de declararse a Grace, pues bien sabe del amor que Noah le profesa a la castaña. Con respecto a Grace, la sigue cuidando y protegiendo, la sigue queriendo tanto o más como el primer día que la vio. Sin embargo, ahora se añade una nueva preocupación pues su padre está gravemente enfermo. Noah no es idiota, sabe que en cualquier momento se puede morir y eso le tiene ligeramente apagado. Más, mientras no pasa nada, él sigue trabajando y ejerciendo, como el excelente profesional qué es.